Costilla rota y golpes contusos presenta sacerdote asaltado en Apizaco
-Fue en plena misa cuando entraron los hampones, la autoridad no tiene pistas hasta el momento de los culpables.
Gustavo Herrera
Tlaxcala,Tlax.- El sacerdote de la ciudad de Apizaco Monseñor Enrique Ruiz Delgado se encuentra convaleciendo en su casa ante los golpes que recibió por parte de ladrones que entraron a robar a los feligreses en plena misa en la iglesia de Fátima.
Al momento, el dictamen médico presenta una costilla rota y golpes contusos en el cuerpo por lo que no ha requerido hospitalización.
Hace dos días, el también canciller del obispado de Tlaxcala había hecho señalamientos sobre la aplicación de exámenes psicológicos a quienes integran los cuerpos se seguridad en el estado a fin de que cumplan sus obligaciones, ayer prácticamente fue asaltado mientras oficiaba misa por la mañana frente a un grupo de feligreses que también sufrieron el embate de la delincuencia.
Al respecto, la secretaria del Canciller Elena Salado en las instalaciones de la Diócesis de Tlaxcala señaló que la agresión ha dejado en reposo absoluto al sacerdote sin poder hablar ni realizar esfuerzos físicos.
«Afortunadamente no paso a mayores no le digo que este bien pero en lo que cabe, el no puede hablar porque como tiene una costilla rota le da tos y le dijo el doctor que evite eso, año he hablamos para saber sino estaba internado, a la hora que el iba a celebrar pasó eso pues hasta a los fieles les quitaron sus pertenencias, su estado es muy molesto dolorosisimo pero más o menos esta, las costillas hay que cuidarlas», sostuvo.
Indicó que de acuerdo a las versiones de los presentes, se tiene conocimiento de que fueron siete ladrones los que se introdujeron al templo católico a sustraer pertenencias y objetos de valor.
«Que desacató a la iglesia, que sacrilegio ya no tanto lamente católica sino respeto por educación pero que se puede esperar de estas pobres gentes y digo pobres porque toda la vida andan en eso y no salen de ahí»
Finalmente se espera que en días posteriores pueda reintegrarse a sus actividades eclesiásticas dependiendo de la alta del médico que lo atiende.
