Un reclamo que es el común denominador de la sociedad en el país y en nuestro estado es sin duda la inseguridad, el incremento de la delincuencia en sus múltiples facetas durante los últimos años es innegable, pero más aún aterrorizante; el robo a casa habitación y a vehículos esta en cifras alarmantes y de igual manera la capacidad de respuesta por parte del ministerio público en torno a las investigaciones y resultados favorables para resolver estos delitos del fuero común.
En la mayoría de nuestros sesenta municipios la situación se está tornando realmente insoportable, los actos violentos generados por arma de fuego como robo, secuestro, asesinato entre otros, se están volviendo una costumbre al momento de conocer las noticias del día. El reparto de culpas por parte del el gobierno estatal con los municipales resulta ofensivo para el ciudadano que solo está a la espera de una solución cuando en el mejor de los casos ha sufrido una perdida material la cual en mayoría ha sido producto de esfuerzo y trabajo de toda una vida.
El gobierno estatal alega que la autoridad municipal no realiza un correcto aseguramiento del probable responsable, con la documentación y cadena de custodia debidamente sustanciadas, mientras que el ministerio publico exhorta a las víctimas a no presentar denuncia formal y llegar a un acuerdo con la persona que en sus narices cometió un delito, vale la pena puntualizar que el M.P. sin lugar a duda es la institución mas descalificada y cuestionada por su le tardes, malos tratos y corrupción sin importar el sistema penal que esté funcionando o gobierno emanado de cualquier partido político.
El nuevo sistema de justicia penal ha resultado ser un fiasco, y es de risa que se discuta si se está implementado de manera correcta o no, o si faltan recursos económicos, la verdad es que no se tenían órganos de gobiernos solidos ni preparados para comenzar a ejecutarlo, por mencionar una cuestión se necesitaba más tiempo de transición del sistema inquisitivo al acusatorio, a opinión personal de un servidor los delitos tipificados como graves tenían que continuar bajo el anterior esquema dando un tiempo mucho pero mucho más prudente para que pudieranser contemplados en el nuevo sistema.
Se tendrían que tomar cartas en el asunto de manera inmediata los tiempos por los cuales está trascendiendo el estado de derecho merece toda la atención por parte de todo los actores políticos, y claro la sociedad deberá asumir su responsabilidad en levantar la voz en todo momento que se sienta transgredida en su derecho de una eficaz impartición de justicia.