“Muchos son los llamados y pocos los elegidos”
Hola queridos lectores hoy, como cada viernes comentaré con ustedes algo de lo aprendido esta semana, en estas fechas tan significativas para nosotros los Mexicanos llegan a mi mente experiencias que estamos viviendo en corazonadas.
Ya les había comentado previamente del proyecto que tenemos en “Corazonadas de Amor contra la Leucemia”, una asociación civil cuya misión es informar sobre los signos de alerta del cancer infantil para una detección oportuna así como atención y apoyo a pequeños y a sus familias en tratamiento.
Derivado a circunstancias especiales que tienen que ver con el cancer, también estamos cumpliendo sueños, digo circunstancias especiales por qué tenemos que enfrentar la muerte cuando los tratamientos no funcionan o por qué el cancer ha regresado o ha generado metástasis, cuando llegue a este punto en corazonadas pensé ¿seré capas de apoyar y no quebrarme?
Varias personas me cuestionaron en este sentido, pero al final, en mi reflexión llegue a una conclusión; tengo que mantenerme fuerte e inquebrantable para poder apoyar, en la medida de nuestras posibilidades, a las familias guerreras que viven este difícil proceso.
Es una experiencia sumamente complicada debido a mis propias circunstancias, pero creo que estas familias deben vivir estos momentos acompañadas.
Uno de nuestros guerreros está en cuidados paliativos(etapa terminal), tristemente, perdiendo una batalla de 3 años contra el cancer y a pesar de ello se mantiene positivo y con ganas de vivir, sin duda ha sido una tremenda y triste experiencia de mi vida conocerlo a él y a su familia.
Su mama, una mujer que me ha dejado tanto, ejemplo de fortaleza y sensibilidad ya no cuestiona, al contrario dice “muchos son los llamados y pocos los elegidos” Lamentablemente su familia ha perdido a otro integrante contemporáneo a nuestro guerrero con el mismo diagnóstico “sarcoma” y sin embargo la familia también se encuentra entera, apoyando y acompañándose, su sencillez y entrega superan todo diagnóstico, la primera vez que fui a verlos me recibieron con mucho amor y con unas gorditas y una rica agua de guayaba … me entregan su corazón cada vez que los visito, yo en cambio he podido hacer muy poco por ellos, lo único que les entregó es mi corazón, un corazón limpio con la única intención de hacer llevadera esta circunstancia, un abrazo, una buena plática, un “no están solos”, quisiera poder apoyar mas, pero lo que más anhelo darle a nuestro guerrero es “vida” y esa no esta en mis manos. Me quedo con mucho de él… sus sabias palabras; “disfruté hasta el último segundo” y sus bendiciones…
Todo esto me hace reflexionar sobre lo que somos en esta vida y sobre el impacto que puedes tener en las personas, hoy tengo muy claro lo que quiero hacer y es apoyar .. convencer a otros que se sumen a la causa para no dejar solas a estas familias…
recuerden que el cancer no distingue condición social, económica, raza, sexo ni edad…
Ninguno de nosotros estamos excentos de vivir esta situación…
Vivamos cada momento y súmense a ayudar …
